Existen dos variables principales en la mama: una es el volumen y la otra es la envoltura cutánea. Diferentes combinaciones de estas dos variables generan diferentes requisitos quirúrgicos estéticos.
La cirugía de levantamiento de mamas con implantes es una cirugía relativamente complicada que combina dos abordajes quirúrgicos diferentes en la misma cirugía.
Hay que calcular los cambios a medio y largo plazo. Sobre todo a la hora de elegir un implante, hay que valorar bien la calidad y elasticidad de la piel. Una piel de baja calidad es siempre más sensible a factores externos como la gravedad. En este tipo de mamas no se deben preferir implantes grandes y pesados. Otro problema, el exceso de piel, debe eliminarse con el tiempo adecuado. Dado que la mitad inferior de la mama soportará el peso del implante, la tensión y la longitud de la piel de esa zona deben ajustarse con cuidado.
Primero se abre la envoltura donde se colocará el implante. Se coloca el implante del tamaño deseado. Luego se levanta la piel flácida y se completa la cirugía. Se recomienda usar un corsé durante un mes después de la cirugía. El corsé limita el edema causado por la cirugía y acelera la recuperación. La reincorporación a la vida social es posible una semana después de la cirugía.