Los labios internos desempeñan importantes tareas funcionales en la zona genital femenina. Actúan como barrera externa de la vagina y la protegen de factores externos. Sus extensiones cubren el clítoris y equilibran el nivel de placer sexual.
El hecho de que los labios internos (labios menores) en el área genital externa de las mujeres sean más grandes de lo normal crea una apariencia cosméticamente indeseable. En una estructura anatómica normal, los labios internos no superan en tamaño a los externos. En términos de color, los labios internos tienen un tono más claro que los labios externos. Que los labios internos sean más grandes que los externos y tengan un tono de color más oscuro es una situación cosméticamente indeseable. Además de las preocupaciones estéticas, esta situación genera problemas de higiene y tendencia a las infecciones. Al usar ropa como trajes de baño y mallas, se produce una apariencia hinchada y causa molestias. Estas molestias reducen la confianza en uno mismo y el placer sexual, reduciendo significativamente la calidad de vida.
Al realizar una cirugía de labioplastia, se debe tener cuidado de preservar las propiedades funcionales de los labios menores. No debe verse simplemente como una cirugía estética. La cirugía de labioplastia se puede realizar bajo anestesia general o regional. La cirugía dura aproximadamente una hora. En la técnica que aplicamos retiramos el exceso de tejido del labio interior. Dado que durante la cirugía también se elimina el exceso de tejido del clítoris, el placer sexual aumenta después de la cirugía.
Además de los grandes labios interiores, a veces también se produce una pérdida de volumen en los labios exteriores. En este caso, además de la cirugía de labioplastia, se puede añadir una inyección de grasa en los labios externos para añadir volumen.